Allá donde el quebranto acaba
en un llanto, inconsolable
donde se deterioró tanto la vida
se abrió un boquete ancho
largo y ancho,donde la herida sangra.
Donde nada es olvido, y todo calla
adonde se revuelve la esencia
y tú, mueres, y tú, moriste
sin un réquiem, que funesta soledad
y la herida se cierra sin palabras
los dos huimos del descalabro.
Pero...si por un solo instante nos amamos
una brizna, en la historia de nuestros mundos
valió la pena, porque ese día, amé la vida
y no me fui a dormir...con llagas en el alma
Nuria.
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